lunes, 6 de mayo de 2013

Mirando al Cielo

A lo lejos, una mariposa de acero silencia una garganta, y nadie llora porque al asesino no se le ve. Ellos usándola conquistan el cielo para destruir la Tierra. Se creen más altos por tener alas en sus mariposas, pero no dejan de ser capullos, y es cierto: no son más que gusanos que se esconde por no saber qué son las lágrimas.